Agua

Ahora que tanto parece preocuparnos el agua, que tanto nos lleva a plantear soluciones que por desgracia ni por parte de las administraciones ni por los propios ciudadanos somos capaces de afrontar con decisión y firmeza, tenemos la sensación de que literalmente se nos escurre entre los dedos.

Este refrescante caño de agua, es tan sólo el espejismo de lo que en tiempos pasados fue, y no tan pasados, ya que hablo de apenas 40 años, pueden parecer muchos pero desgraciadamente es un tiempo relativamente corto para unos cambios tan bruscos en el Medio Ambiente.

La imagen en cuestión es de hace un año, en el Arroyo Jabonero, creo recordar que en el cuarto pantano. Este arroyo lo recorrí infinidad de veces con mis amigos, cuando tan sólo tenía entre 10 y 14 años aproximadamente, lógicamente durante más años, pero hago referencia a esta época porque es cuando mejor recuerdo como estaban cada año los pantanos del Arroyo Jaboneros, que para quien no lo sepa, se trata de represas creadas cada dos o tres kilómetros aproximadamente, para contener las avenidas de agua, prácticamente se trataba de saltos de agua de una altura de varios metros, y en ellos, a su pie y por el impacto del agua se formaban posas de agua limpia y cristalina, donde los niños nos bañábamos en verano, digo esto porque en esos veranos sí mantenían agua, lo que ahora ni por asomo.

Nos importaba un bledo el que hubiese ranas, culebras, etc., al contrario allí andábamos observando a todo bicho que se moviera por el entorno, y nos bañábamos igualmente.

Por eso comento que esta foto no es más que un espejismo de aquellos tiempos, de las veces que últimamente he subido por allí, nada de nada, todo más seco que el Sahara, y las ranas ya no llevan cantimplora porque ni para eso tienen agua.

¿Qué nos esperará más adelante?